Nota informativa de la OIT sobre la economía del cuidado
Nuevo informe de la OIT revela una brecha global de cinco meses en los permisos parentales remunerados entre hombres y mujeres
El estudio, que conmemora los 25 años del Convenio sobre la protección de la maternidad, destaca que lograr permisos parentales más equitativos, inclusivos y sostenibles requeriría una inversión adicional anual media del 0,13 % del PIB.
24 de junio de 2025
GINEBRA (OIT Noticias) – Un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) revela que existe una brecha media mundial de más de cinco meses entre los derechos de permisos parentales remunerados de mujeres y hombres, y hace un llamado urgente a cerrar esta desigualdad de género.
La publicación, Closing the Gender Gap in Paid Parental Leaves (Cerrar la brecha de género en los permisos parentales remunerados) inaugura la nueva serie de informes breves de la OIT sobre la economía del cuidado. Publicado en el marco del 25.º aniversario del Convenio sobre la protección de la maternidad, 2000 (núm. 183), el estudio concluye que las madres tienen derecho, en promedio, a 24,7 semanas de permiso parental remunerado, frente a solo 2,2 semanas en el caso de los padres —una diferencia de más de cinco meses.
«Esta brecha refuerza las desigualdades de género en el hogar y en el mercado laboral», afirmó Sukti Dasgupta, directora del Departamento de Condiciones de Trabajo e Igualdad de la OIT. «Permisos iguales, no transferibles, financiados públicamente y respaldados por sistemas de protección social son fundamentales para lograr un cambio real».
Una brecha de género global con consecuencias reales
El hecho de que muchas mujeres tengan derecho a permisos parentales remunerados, incluidos los de maternidad, representa un avance positivo y refleja una creciente alineación con el Convenio núm. 183 de la OIT, una condición previa para la igualdad de género. Sin embargo, para alcanzar una verdadera equidad en las responsabilidades de cuidado y en el mercado laboral, los hombres también deben contar con permisos parentales remunerados adecuados y no transferibles. De lo contrario, los roles de género tradicionales tienden a perpetuarse, y las responsabilidades de cuidado siguen recayendo de forma desproporcionada sobre las mujeres.
El informe muestra que el 57 % de la población mundial vive en países donde las mujeres reciben entre tres y seis meses más de permiso parental remunerado que los hombres. En 28 países, la diferencia supera un año. Y en 71 países, los padres no tienen derecho alguno a permisos parentales remunerados por ley.
El estudio subraya que el diseño de las políticas es tan importante como su duración. Cuando el permiso de paternidad está mal remunerado, no está protegido por ley o es financiado por los empleadores, los padres rara vez lo utilizan, lo que perpetúa la carga de cuidado sobre las mujeres. Según un estudio de la OIT, en 2023 había 708 millones de mujeres en edad de trabajar fuera de la fuerza laboral por responsabilidades de cuidado no remuneradas, frente a solo 40 millones de hombres.
«Cerrar la brecha de género en los permisos parentales remunerados implica llevar a la práctica el principio fundamental de igualdad de oportunidades y trato para las personas trabajadoras con responsabilidades familiares», añadió Dasgupta. «Esto incluye ratificar y aplicar el Convenio núm. 183 de la OIT, reconocer el rol de los padres en el cuidado y garantizar una cobertura universal de los permisos parentales».
Según estimaciones de la OIT basadas en su Simulador de Inversión en Políticas de Cuidado, garantizar al menos 14 semanas de permiso remunerado a una tasa del 67 % del salario anterior para mujeres y hombres requeriría una inversión anual adicional global de 142.000 millones de dólares para 2035. Esto representa, en promedio, un aumento del 0,13 % del PIB respecto a la inversión pública actual, con variaciones desde el 0,08 % del PIB en Europa y Asia Central hasta el 0,49 % en los Estados Árabes. Esta inversión podría generar más de cuatro millones de empleos formales en todo el mundo.
Hojas de ruta para la reforma
Aunque 121 países reconocen el derecho a un permiso de paternidad, solo 105 lo remuneran, y apenas 37 lo han introducido o ampliado en la última década.
Ejemplos internacionales ofrecen inspiración. El sistema neutral en cuanto al género de España ha cerrado de forma efectiva la brecha. Los países nórdicos, como Suecia, han logrado un aumento en la utilización del permiso por parte de los padres mediante cuotas “úselo o piérdalo”. Países como Seychelles, Costa Rica, Dinamarca, Mongolia y Omán han adoptado modelos de financiación mixta que incluyen a trabajadores informales y personas no nacionales. En Singapur, las reformas introducidas en 2024 ampliaron el permiso parental compartido —cada progenitor recibirá tres semanas, que se ampliarán a cinco en 2026—, ayudando a que tanto empleadores como familias puedan planificar mejor y distribuir las tareas de cuidado.
El informe propone cuatro acciones clave de política:
- Ratificar y alinear la protección de la maternidad con las normas de la OIT – Aunque 54 países cumplen con los requisitos del Convenio núm. 183, muchos aún deben ratificarlo y aplicarlo, incluyendo el traspaso del financiamiento desde los empleadores hacia mecanismos públicos.
- Reconocer y apoyar el rol de los padres en el cuidado – El permiso de paternidad debe incluir protección del empleo, una duración adecuada, buena remuneración, financiación pública y carácter no transferible para fomentar su uso y redistribuir las tareas de cuidado no remuneradas.
- Proporcionar permisos parentales remunerados para cada progenitor – Los derechos deben ser individuales, no familiares, con beneficios adecuados y opciones flexibles, como el permiso a tiempo parcial, para promover su utilización por parte de los padres.
- Garantizar una financiación y cobertura inclusivas – La financiación basada en la protección social y el diálogo social son esenciales para incluir a trabajadores en empleos informales, atípicos, y en micro, pequeñas y medianas empresas.